Testimonio Camelia Cojocariu | 21 años

Hola, mi nombre es Camelia, tengo 21 años y mi estancia ha sido en Arezzo, un pueblo de la región de la Toscana, Italia.

Si soy sincera, cuando me apunté a esta experiencia en mi centro (López Vicuña) y salí escogida sentí mucha ilusión, pero a medida que se acercaba el día de irme sentía cada vez más miedo, sin ganas de irme por no saber qué me depararía todo el mes, pero por suerte cogí el avión y ahí empezó mi Erasmus.

Al aterrizar en Florencia tuvimos que coger un bus y un tren para llegar a Arezzo donde nos esperaba nuestra tutora Giorgia para ayudarnos con las maletas y guiarnos a nuestro piso. Al llegar al piso me llevé una sorpresa ya que no era lo que me imaginaba, un poco antiguo y sin microondas, pero al cabo de tres días me acostumbré y todo bien. En cuanto a la convivencia con mis compañeros, fue buena, los típicos ‘piques’ por costumbres diferentes de convivir en casa, pero nada grave.

Los primeros días estuvimos visitando el pueblo y conociendo a nuestros jefes del lugar donde trabajaríamos.

Este año he acabado el CFGM de Farmacia y Parafarmacia y he realizado las prácticas del Erasmus + en la ‘Farmacie Communale nº 3’ de Arezzo. En la farmacia todo ha sido perfecto, sin queja alguna. Mis compañeras eran muy atentas y amables, siempre pendientes de mí, y aunque algunos días no tenía mucha cosa que hacer, el tiempo era pasajero. De hecho, los últimos días antes de irme, el señor que trabajaba conmigo tiene un restaurante y me invitó a mí y a mis compañeros a comer en su local. También me regalaron productos e hicimos un desayuno como despedida.

Por último quiero comentar que iba abandonar (por suerte no) esta experiencia a la semana y media de llegar por problemas familiares. En este sentido, quiero que sepáis que tanto la tutora que tuve en Arezzo como toda la Asociación Mundus estuvieron muy presentes y preocupados por mí, intentando que volviera, si lo veía necesario, de la mejor manera posible. Con esto quiero deciros que si pasa algo grave ellos serán los primeros en ayudaros con todo, tenéis esa confianza asegurada.

No os voy a negar que eché mucho de menos mi casa, mis amigos, mi familia… y que la primera semana me fue muy dificil acostumbrarme, pero seguramente lo volvería a repetir. Me alegro de haber realizado esta experiencia y os lo recomendaría a todos.