Testimonio Carmelo Peinado | 19 años
ABRIL DE 2019
Este mes fui a un campamento de música con los niños/as de mi trabajo. Nos alojamos en "Praia da Areia Branca" durante tres días. ¡Fue muy divertido! Tuvimos el día intercultural de Turquía, Francia y Luxemburgo, donde aprendí mucho sobre las tradiciones, las comidas y las celebraciones que tienen. También fui a un evento llamado "Futuralia" donde estuvimos en un stand jugando un juego europeo con la gente. Finalmente, hice un largo viaje por el norte de Portugal: fui a muchos lugares como Porto y Braga, ¡fue realmente increíble!
MARZO DE 2019
Este mes fue el carnaval, pero no pude celebrarlo con mis compañeros de piso porque fui a España para visitar a mi familia y mis amigos. De todos modos, prepararon una fiesta con nuestra organización y creo que fue muy agradable. Fuimos a la universidad para hablar sobre el SVE. ¡Estaba muy nervioso porque tenía que hablar frente a los universitarios! También tuvimos el día intercultural de Italia y Eslovaquia. ¡No sabía que los italianos tenían muchos dialectos! Realmente me gustó la presentación de Eslovaquia porque mi compañero lo hizo muy divertido.
FEBRERO DE 2019
Este mes recibí mi formación a la llegada (On Arrival Training) en Figueira da Foz junto a otros 30 voluntarios de todas partes de Portugal. Yo era el más joven, así que fui un poco tímido el primer día, pero luego me di cuenta de que no era una razón para avergonzarme y comencé a hablar con todos, hacer bromas, etc. Fue una experiencia inolvidable.
Después de eso, tuvimos el día intercultural austriaco y rumano, y la sesión de capacitación sobre el trabajo con personas discapacitadas. Aprendí muchas cosas que sería bueno hacer si trabajas con personas discapacitadas y las cosas que no debes decir/hacer con ellas. También fuimos a un espectáculo de teatro llamado "A Vida É Sonho" con la gente de ProAtlântico. ¡Fue tan divertido!
ENERO DE 2019
Cuando llegué a Lisboa, estaba un poco nervioso y emocionado porque era la primera vez que salía de casa. Una vez que llegué a Casa Europa, el resto de voluntarios comenzaron a hablar conmigo y eso me hizo sentir muy feliz porque pensé que el comienzo sería un poco difícil. Después de unos días comencé a trabajar en la escuela con otro voluntario. Los niños estaban entusiasmados con la idea de tener otro voluntario para jugar.
Tuvimos una formación muy interesante sobre el trabajo con personas mayores. También tuvimos el día intercultural español y húngaro, en el que preparamos mucha comida típica española, hicimos una presentación de nuestra comunidad autónoma y un pequeño cuestionario sobre la cultura de España. También visité la playa cerca de Casa Europa y algunos lugares de Lisboa. ¡Las vistas eran increíbles!
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