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Testimonio Lukas Brunner | 20 años

Lukas es alemán y fue voluntario en Fundació Tallers, ayudando en tareas con personas con discapacidades. 


Por la situación de Covid-19 había despertidas imprevistas para mucha gente. – Mí despertida muy grave era de mí voluntariado. Todavía me cuesta mucho esta despertida, pero creo que es seguro que entiendes cuando lees mi testimonio.
Soy un chico alemán quien acaba de hacer su bachilerato. Es un otro momento de gran despertidas, un momento cuando tienes que preguntarte: ¿Qué quiero hacer en el futuro?

No quería estudiar ya, me gustaba vivir en el extranjero y tambien ganar experiencia en el sector social.  No sabía que debería hacer hasta encontré la oportunidad de hacer un proyecto de CES. Apliqué al proyectó de Fundació Tallers. A un lado por mí prima con síndromo de down tenía experiencia en ayudar personas con discapacides mentales. Al otro quería meyorar mí castellano.

Al final de septiembre empezó que era una aventura para mi, no tenia idea de lo me estaba esperando. El primer mes me acostumbré con mi “nuevo vida”, vivir con una señora muy amable, explorar Santa Coloma, Barcelona y otros lugares de Catalunya con mis co-voluntarios y nuevos amigos y claro a “la familia del voluntariado” en Tallers.
Es el titulo de nuestro proyecto, que primero me parezaba un poco raro. Pero ahora tengo una vista más clara, porqué de verdad no parecía como un trabajo para mí, si mas formar parte de un gran comunidad, o familia. 

El voluntariado consisté en ayudar y acompañar a adultos con discapacidad mental en su trabajo y en su actividad diaria. A veces hay tareas que parecen un poco como los de padres. Estás aquí por tús “niños” en los pequeños retos de vida. Aprendí estar ahí para gente cuando están feliz, enfandado, bromeando, trabajando, bailando o necesitan ir al bano inmediatamente cuando estamos paseando. Pero creo que no solo estaba ahí para “mís chicos”, pero además para los otros voluntarios, los educatores, mís amigos. Y todos tambien estaban ahí para mí en todos los retos de estar en otro país haciendo unos de sus primeras experiencias profesionales. Quiero decir gracias por ese soporte, por la alegria, por la fiesta, por la buena comida, por la oportunidad de crecer y mucho más.

Con desarollar comunidad es poco como construir un castell, solo es un castell estable con el soporte de todos. Vamos, costruimos castells si es al nivel de familia, vecinos y amigos, o al nivel europeo y global.

Solo hay un otro retro. Ahora no podemos reunirnos, al menos fisicamente como en la Fundació Tallers o una colla castellera. Mantenemos distancía por los más debil de nuestro comunidad. Especialmente ahora es importante estar por el otro y que nos soportamos
En breve: SOLIDARIDAD


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Lukas Brunner