Testimonio María Concepción Losa | 30 años
Mi nombre es María y he hecho un Servicio de Voluntariado Europeo (SVE) en Pazardzhik, Bulgaria. Estaba en un centro de discapacidad de adultos, en otro con niños y en un cole.
En mi opinión, ha sido la mejor experiencia de mi vida. Recomendable 100% . Gracias a esta oportunidad he podido convivir durante un año con otros voluntarios de diferentes nacionalidades, lo que me ha hecho ser una persona mucho más flexible, conocer diferentes culturas, aprender diferentes idiomas y, sobre todo, reforzar el inglés.
El poder participar en esta experiencia te permite crecer tanto profesional como personalmente. Siempre he tenido la ilusión de ser voluntaria, soy feliz ayudando a los demás pero lo que no sabía era todo lo que iba a recibir a cambio.
Definitivamente no era consciente de cómo cambiaría mi vida, mi persona mi forma de ver las cosas e incluso encontrar el amor de mi vida, ya que durante mi EVS me casé en Estambul.
Os animo a todos a vivir esta experiencia porque supondrá un antes y un después.