Testimonio Paula Callejas | 18 años
Aún me acuerdo de cuando subía al avión que estaba demasiado nerviosa y ansiosa por llegar, ya que los aviones no son lo mío…
Tenía muchas emociones positivas y negativas, como ¿qué me deparará este mes?, mis compañeros del voluntariado, el sitio, si sería bonito o no, las actividades,…Realmente estaba que tiraba cohetes de la emoción que tenía.
Cuando llegué y ya me instalé fue como: "¿estoy aquí, enserio? Estoy flipándolo". Era todo tan surrealista que no me creía que estaba en Grecia y estaba flipándolo en colores.
Este mes ha sido una locura. He conocido a gente que en el día de hoy los quiero como la trucha al trucho y que sin ellos esto no hubiera sido lo que ha sido, de las risas que hemos vivido, las fiestas que hemos pasado juntos, de las excursiones a otros sitios, de los días de playa, las actividades que hacíamos por las tardes y el trabajo por las mañanas, las tardes libres en los bares hablando de todo y haciendo las tonterías que te alegraban los días, los paseos por la playa para ir a cenar. Esta experiencia me ha enseñado tantas cosas que yo no sabía, que les debo un enorme gracias y quiero decirles que los echo muchísimo de menos ☹
¡Y también darle las gracias a Ruth nuestra monitora que ha sido lo más en este viaje y que la quiero muchísimo!
Y darle las gracias a Mundus que sin ellos no hubiera podido vivir esta experiencia.
Y darle las gracias a todos por hacer esta experiencia única